Pan y Aceite

El pan es uno de los mejores compañeros para realizar maridajes culinarios de lo más apetecibles, ya que es un alimento agradecido cuya riqueza y variedad hace que combine muy bien con diversas bebidas y para acompañar otros alimentos. Son típicos los maridajes de pan con quesos, vinos, embutidos,  mermeladas, patés, cavas…

Pero en esta ocasión queremos centrarnos en el maridaje entre pan y otro de los pilares de nuestra dieta mediterránea, el aceite. Dos alimentos que bien maridados no defraudan nunca y que provocan las delicias de los paladares más exigentes, y es que emparejar la hogaza correcta con la oliva adecuada puede resultar un manjar de dioses.

Maridar estos dos componentes no es difícil, sólo es cuestión de experimentar y como en todo, también es cuestión de gustos. Tal vez la parte complicada sea saber por dónde empezar así que aquí van algunos consejos de emparejamiento para iniciarse en el mundo del pan y el aceite. Cuatro ejemplos de maridajes propuestos por “Aceites de Oliva de España” que, teniendo en cuenta aspectos visuales, olfativos y gustativos, harán que la experiencia de mojar el pan en aceite sea inolvidable:

  • Aceite de arbequina con pan de payés: el aceite de oliva Virgen Extra de la variedad arbequina es un aceite de oliva suave, con un sabor más bien dulce y sin ningún regusto amargo, por lo que es ideal para tomar con tostadas y para elaborar el típico “pa amb tomaquet”. Por eso, el pan que combina mejor con esta variedad de aceite es el tradicional pan de payés.
  • Aceite de la variedad cornicabra con chapata: el aceite de oliva Virgen Extra de la variedad cornicabra presenta un notable equilibrio entre dulce y amargo con un toque picante de intensidad media. ES un aceite afrutado y aromático que liga a la perfección con el pan de chapata
  • Aceite de hojiblanca con pan de espelta o centeno: La suavidad de esta variedad de aceite de oliva Virgen Extra marida prácticamente cualquier tipo de pan, sobre todo aquellos con aromas más sutiles como los de especias, de hierbas, de espelta o los de centeno.
  • Aceite de la variedad picual con pan de cebolla: Esta variedad de oliva da unos aceites con personalidad, que necesitan de panes más contundentes, de miga más densa y sabores potentes. Tanto los panes gallegos como los panes de cebolla son idóneos para mojar con el aceite de la variedad picual

Fuente: Graniers